lunes, 21 de diciembre de 2009

A la mierda

En la última entrada hace más de dos semanas, cuando Haidar se encontraba sólo en la mitad del largo camino que le quedaba por recorrer, aludimos a la hipocresía de una Unión Europea que, mientras criticaba con la boca pequeña la postura marroquí, firmó un acuerdo que facilitaba la importación de tomate con el reino Alauí.

Pues bien, dos semanas después de aquello, y para seguir encendiendo al personal –pues sabe que es su única posibilidad de no hacer el ridículo por tercera vez consecutiva- salió ayer el líder de la oposición con tres tomates de rama en la mano afirmando vehementemente a un público entregado compuesto en su mayoría por agricultores que aquel –los tomates- era el precio que el Gobierno de Rodríguez Zapatero había pagado para dar puerta al marrón que tenía en el aeropuerto de Lanzarote.

Dado que siempre he estado seguro que el único nexo que me unía al líder de la oposición era el gusto por el ciclismo, quería ratificar, sencillamente, que así sigue siendo. Y lo es, en primer lugar, porque las declaraciones de Rajoy son, además de un monumento al populismo más cutre, una falacia de dimensión desproporcionada.

Una cosa es criticar –como hice en su día- la postura de la UE que firma en un momento crucial un acuerdo que lleva negociando durante un largo periodo de tiempo. Así, en mi opinión, podía haber utilizado esa situación para agilizar la solución del problema forzando a Marruecos a una decisión inminente sobre el asunto Haidar.

Otra diferente es decir -como hace Mariano- que el asunto se ha resuelto -quince días después de su firma- gracias al acuerdo de importación y que, además, es culpa de Zapatero porque va a arruinar al campo español; cuando, como es sabido, la competencia en materia agrícola queda lejos de Madrid y se encuadra en el marco de la PAC que se negocia en Bruselas.

Y así, Mariano, como buen registrador de la propiedad hace lo que cree que mejor se le da: opositar. Pero claro, una cosa es controlar al gobierno y proponer alternativas y otra diferente tomarnos a todos por idiotas. Pues, aunque le parezca al “líder” –permítanme las comillas” de la Oposición –permítanme en este caso la mayúscula porque no hace otra cosa- parecidas, la una con la otra no tienen nada que ver.

Como hace unos mesecitos que la derecha española se dio cuenta que la victoria en las próximas generales pasa por un catastrofismo desmesurado, se dedican desde entonces a caldear el ambiente con mensajes breves y directos al estilo sms que calen hondo en una ciudadanía polarizada por la coyuntura económica que se deja caer en los brazos de cualquiera. Desde el “Esto es un desastre” al “Zapatero va a prohibir los villancicos” de Cospedal, pasando por “Viva la piratería en internet” o, aquí en Aragón, por “Nos invaden los catalanes”.

Pues si la situación económica “es un desastre” a lo mejor se deba a años y años de crecimiento basado en el ladrillo y de ahí que la crisis española no sea financiera sino estructural.

Si el grupo parlamentario socialista apoya una proposición no de Ley en el Congreso a propuesta de ERC para la retirada de los crucifijos en los colegios –pues de momento poco importa al Estado lo que la Señora Cospedal entone en su casa en Nochebuena- no hace sino tratar de cumplir una sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en la que se ha pronunciado a favor de su retirada para garantizar la libertad religiosa de todos los alumnos de las escuelas –de los que creen y de los que no lo hacen-. Pues algún día comprenderemos que una cosa es la esfera de lo privado y otra muy diferente la de lo público; en la que tenemos que caber TODOS.

Si Zapatero es un represor que prohíbe las descargas ilegales –reiteramos: ilegales- y estas en contra de ello me parece perfecto que, dentro del Estado democrático que garantiza la libertad de expresión –prohibir las descargas no es prohibir la libertad de expresión en internet, Mariano- muestres tu disconformidad con ello. Ahora bien, no puedes mostrarte disconforme con una medida que tú mismo apoyaste en Bruselas. Pues o careces de criterio o no sabes lo que apoyas y, sinceramente, no se cual de las dos opciones es más preocupante para un partido que aspira a formar Gobierno.

Y por último. Si en Aragón se aprueba una Ley que considera el catalán como lengua aragonesa no hace sino constatar la situación de la Franja. Punto. De ahí a querer ver una futura reclamación soberanista de la República Independiente Catalana sobre los nobles territorios aragoneses va un paso más que considerable. Y ello es así dado que en lo que hemos llamado Estado de las Autonomías estas carecen de soberanía; y por tanto de derecho a la autodeterminación -y no digamos ya a la invasión del vecino-.

Como he terminado en Aragón, y parece que está de moda lo de los mensajes cortos, concisos e hirientes, me despido con uno de un político de esta tierra que también hablaba claro pero con bastante más criterio: Váyanse a la mierda.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Ánimo

Lleva desde el 13 de noviembre en el aeropuerto de Lanzarote en huelga de hambre intentando llamar tú atención por una causa que, además, la merece. Critica la vulneración flagrante de los derechos humanos, saqueo económico y política colonialista llevada a cabo por el régimen marroquí en el Sáhara Occidental.

Mientras criticamos desde Europa –con poco énfasis, por cierto- la postura que el reino alauí mantiene con el asunto del Sáhara, la UE, la valedora mundial de los principios democráticos, la defensa de los derechos humanos, la equidad, la integración, la solidaridad etc, etc, hace el juego a Rabat renovando ayer mismo el acuerdo económico que favorece la importación del tomate marroquí.

Ni Tratado de Lisboa o Constitución Europea. Ni europeístas o euroescépticos. Ni una política exterior común o cada uno por su lado. No. Lo primero que tendría que plantearse Europa es adquirir un compromiso real con los valores que dice representar.
El régimen marroquí, con un carente democrático claro –el partido del Rey arrasa gracias a la red de caciques que se extiende en las zonas rurales- y un Estado de Derecho endeble –excarcelaciones masivas a finales de Julio para celebrar el aniversario de ascenso al trono del monarca- es el antagonista a la propuesta que debería enarbolar Europa en un momento en que su peso global se tambalea ante la pujanza china.

Explicación económica para la clase política –que parece no entender otros términos-:
Ante el incremento de la cantidad ofertada de tomate, el precio de éste, como es evidente, descenderá de forma progresiva hasta alcanzar un nuevo equilibrio. Sin embargo, el coste asociado a la producción se está incrementando en mayor medida que los ingresos, dando lugar a un beneficio negativo.

Ah, ¿Qué cuáles son los costes de producción si se trata de una importación?

Los costes no son otros que la traición a tu dignidad, tus principios y tu honestidad. Cosa que, por cierto, le sobran a Aminetu Haidar. Ánimo.